Los equipamientos de compresión, imprescindibles para el rendimiento deportivo

Diferencia entre el equipamiento de compresión y el equipamiento clásico en el deporte
La compresión se ha convertido en un elemento imprescindible en el mundo del deporte. Ya sea en los campos de fútbol, en las pistas de tenis o en los gimnasios, cada vez más atletas utilizan manguitos, calcetines o pantalones de compresión. Pero ¿en qué se diferencian realmente estos productos de la ropa deportiva tradicional? Y, sobre todo, ¿cuáles son sus beneficios reales?

1. El principio de la compresión

La ropa de compresión ejerce una presión graduada sobre los músculos, favoreciendo la circulación sanguínea y el retorno venoso. Esto ayuda a llevar más oxígeno a los músculos y a eliminar más rápido los desechos producidos durante el esfuerzo, como el ácido láctico.
En cambio, la ropa deportiva clásica no tiene un efecto fisiológico directo. Está diseñada para la comodidad, la transpirabilidad o el estilo, pero no contribuye directamente al rendimiento muscular.

2. Ventajas durante el esfuerzo

Durante la actividad, la compresión ayuda a reducir las vibraciones musculares causadas por impactos o movimientos bruscos. Estas microvibraciones, a menudo imperceptibles, son una causa frecuente de fatiga y microlesiones.
Los manguitos de brazo Floky NO STRAIN o Incrediwear Arm Sleeve ilustran bien este efecto: estabilizan los músculos del brazo y del antebrazo, reducen la fatiga y mejoran la precisión de los movimientos, un verdadero beneficio para los deportes de raqueta o de lanzamiento.
Los calcetines Floky S-MASH 2.0 o los pantalones Knapman aportan un soporte específico en el gemelo, el tendón de Aquiles y el pie, limitando el riesgo de lesiones y mejorando la propiocepción, es decir, la percepción del cuerpo en el espacio.
El pantalón corto de compresión Knapman, al igual que el pantalón largo de la misma gama, destaca por su calidad premium y su tejido innovador. Gracias a una compresión precisa y bien distribuida, mejora el soporte muscular, reduce las vibraciones y favorece la circulación sanguínea durante el esfuerzo. Cómodo, transpirable y diseñado para seguir los movimientos naturales del cuerpo, ofrece un apoyo óptimo tanto para el entrenamiento como para la recuperación. Una elección ideal para deportistas que buscan rendimiento y confort duradero.

3. Beneficios después del esfuerzo

Una de las grandes ventajas del equipamiento de compresión es su papel en la recuperación.
Después de un entrenamiento o una competición, usar manguitos o calcetines de compresión ayuda a reducir el dolor muscular, la sensación de piernas pesadas y la hinchazón relacionada con el esfuerzo.
Los productos Incrediwear, por ejemplo, utilizan una tecnología de tejido activa que estimula naturalmente la circulación sanguínea sin necesidad de una compresión mecánica fuerte. Resultado: una recuperación acelerada, ideal tras una sesión intensa.
Los calcetines Knapman Ultra Recovery van aún más lejos con una compresión científicamente medida (hasta un 45 %) para mejorar el drenaje y reducir significativamente la fatiga muscular post-entrenamiento.

4. Comodidad y sensaciones

Algunos deportistas temen que la compresión limite sus movimientos o sea incómoda. En realidad, las tecnologías actuales ofrecen tejidos ultraelásticos y transpirables que se adaptan al cuerpo sin restringir los movimientos.
Los modelos Floky, por ejemplo, están diseñados con zonas de compresión diferenciadas: más soporte donde es necesario (como alrededor del codo o el gemelo) y más flexibilidad en otras áreas.
Por el contrario, la ropa deportiva clásica —pantalones cortos, camisetas o calcetines estándar— no proporciona soporte muscular ni efecto de estabilización o recuperación.

5. ¿Para quién está diseñada la ropa de compresión?

Contrariamente a lo que se podría pensar, la compresión no está reservada a los atletas profesionales.
Los deportistas amateurs, los corredores ocasionales e incluso las personas que pasan mucho tiempo de pie pueden beneficiarse de sus efectos:

• Mejora del rendimiento gracias a una mejor oxigenación muscular
  
  

• Reducción de la fatiga durante y después del esfuerzo
  
  

• Prevención de lesiones estabilizando las zonas sensibles
  
  

• Recuperación más rápida, esencial para encadenar sesiones sin dolor